Para cambiar el fondo de escritorio en Windows, puedes seguir estos pasos:
Haz clic derecho en cualquier lugar vacío del escritorio y selecciona la opción "Personalizar" en el menú contextual.
Se abrirá la ventana de "Configuración personalizada". Aquí encontrarás diferentes opciones de personalización.
Haz clic en la opción "Fondo" en el panel izquierdo de la ventana.
En la sección "Fondo de escritorio", verás una lista desplegable con varias opciones:
Imagen: Permite seleccionar una imagen de tu computadora como fondo de escritorio.
Presentación: Permite configurar una presentación de diapositivas con varias imágenes como fondo de escritorio.
Color sólido: Permite seleccionar un color sólido como fondo de escritorio.
Wallpaper Engine: Si tienes instalada la aplicación Wallpaper Engine, puedes utilizarla para configurar fondos animados.
Si seleccionas la opción "Imagen", haz clic en el botón "Examinar" para buscar la imagen que deseas establecer como fondo de escritorio. Una vez seleccionada, la imagen se aplicará automáticamente.
Si seleccionas la opción "Presentación", puedes agregar varias imágenes haciendo clic en el botón "Agregar una carpeta" y seleccionando la carpeta que contiene las imágenes. Luego, elige la frecuencia con la que deseas que se cambien las imágenes.
Si seleccionas la opción "Color sólido", elige el color que desees utilizar como fondo de escritorio.
Una vez que hayas realizado los cambios, cierra la ventana de configuración personalizada. Tu fondo de escritorio se actualizará según las opciones que hayas seleccionado.
¡Eso es todo! Ahora deberías tener un nuevo fondo de escritorio en tu Windows.
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